Existe la creencia en el pensamiento colectivo de que Francia ayudó a España en la lucha contra ETA a cambio de acuerdos comerciales como la entrada de los supermercados Carrefour y de los coches Peugeot en el mercado español. Ya que al principio, Francia tenía una actitud pasiva ante ETA ya que, al principio, sentían una especie de ’respeto’ hacia la organización por el papel que esta había jugado en la lucha contra el franquismo.